El Departamento de Educación ha propuesto una nueva distribución horaria en el bachillerato científico, reduciendo horas en algunas materias esenciales, con el argumento de alinearse con el sistema estatal. Esta nueva propuesta no se ha consultado a docentes ni a expertos en la materia sobre el impacto de estos cambios.
La reducción de horas dificultará cubrir los amplios currículos del bachillerato, afectando la preparación del alumnado para la universidad. Además, la ampliación de optativas generará desigualdades entre centros grandes y pequeños, pues no todos podrán ofrecer las mismas materias. Esto provocará diferencias en la formación del alumnado, creando centros de primera y segunda categoría.
ANPE también señala que no se ha presentado un marco legal que justifique estas modificaciones. Las autonomías tienen cierta flexibilidad en la organización de las materias optativas, por lo que, si el Departamento no puede justificar pedagógicamente los cambios, debería mantener la distribución actual, con tres horas semanales para Física, Química, Biología y Geología en 1º de bachillerato.
Otro aspecto que revisar es la enseñanza de las lenguas en bachillerato, que debería volver a tres horas semanales, ya que son materias evaluadas en las pruebas de acceso a la Universidad (PAU). También es necesario replantear el trabajo de investigación, que supone una carga excesiva para el profesorado y el alumnado. Además, con el uso de la inteligencia artificial, se debe garantizar que esta actividad siga siendo un verdadero aprendizaje de investigación. Si se mantiene como asignatura, se deben asignar horas específicas para su tutoría y seguimiento.
Estos cambios constantes generan desmotivación y estrés en el profesorado, que empieza cada curso sin directrices claras y con normativas que cambian año tras año. Es necesario respetar su labor y garantizar unas condiciones adecuadas para su trabajo, en lugar de imponerles más carga laboral y cambios estructurales sin consenso.
ANPE exige un modelo educativo que respete la experiencia docente y escuche a los expertos, garantizando un bachillerato que prepare adecuadamente al alumnado para estudios superiores. Por ello, rechaza cualquier modificación que reduzca o compacte horas de materias de modalidad. Cualquier cambio debe ser fruto del diálogo con los docentes. De lo contrario, ANPE considera que es el momento de impulsar movilizaciones.