Emprendedor y especialista en empleados digitales. Tras su paso por varias empresas tecnológicas, ha fundado CloneByMe. En esta aplicación podemos volcar información de nuestra asignatura y crear un agente de Inteligencia Artificial que nos ayude.
¿Qué es CloneByMe?
Es una plataforma muy versátil que sirve para varios sectores. En el ámbito educativo los profesores pueden crear y entrenar agentes de Inteligencia Artificial. Estamos incluyendo una inteligencia artificial que no les da la respuesta, sino que los guía hacia ella, como haría cualquier profesor. La ventaja es que este «profesor» puede estar disponible a todas horas, ayudando al alumno a aprender.
Es una de nuestras preocupaciones como docentes, el sedentarismo cognitivo…
Sí, también estamos trabajando en prevenir el uso indebido de la inteligencia artificial por parte de la comunidad educativa. La idea no es rechazar la IA, sino usarla bien. Queremos evitar el desplazamiento del esfuerzo cognitivo, es decir, que los alumnos no razonen, especialmente en edades tempranas, y opten por el atajo de copiar y pegar.
«Creo que la IA no viene a sustituirnos, sino a complementarnos como un copiloto. Tiene sus limitaciones, el ser humano siempre es superior.»
¿Cómo funciona el proceso una vez que entramos en vuestra página?
Cualquier persona, sin conocimientos avanzados, puede crear agentes de inteligencia artificial. Sólo tienes que adjuntar tu información para entrenarla, decirle qué debe hacer el agente, y luego integrarlo en tu aula. Para ello, incluso tenemos plantillas con acciones concretas. Un agente de inteligencia artificial también puede realizar otras labores, enviar correos y automatizar procesos administrativos. Depende de la información que le des y las tareas para las que le entrenes.
Imaginemos que le damos la programación de nuestro curso o parte del temario…
En ese caso, tus alumnos podrían preguntar a tu agente, por ejemplo, con qué criterios se va a evaluar la tercera evaluación o qué temas se verán en la segunda. La herramienta es muy versátil y horizontal, permite a los profesores preparar las clases más rápido y centrarse en el aprendizaje del alumno.
¿Y si no responde según nuestro criterio?
Lo puedes ajustar en el panel de instrucciones con tus propias palabras, puedes elegir su estilo, personalizar los colores del texto, añadir preguntar frecuentes, incluso ponerle tu propia voz. Además, el avatar puede tener un texto de bienvenida o preguntas predefinidas.
¿Cómo tratáis el tema de la privacidad?
Por ejemplo, damos la opción de trabajar con distintos modelos de lenguaje. Si no quieres ceder tus datos a una empresa específica, nos conectamos con otro modelo. No usamos información para entrenar modelos ni la almacenamos. Tú subes tu información y, si decides borrar tu cuenta, toda la información se elimina. Ofrecemos total seguridad y transparencia.
¿Por qué un avatar?
El proyecto nació de la idea de una persona, que quería digitalizarse. Al final, evolucionamos hacia otros caminos pero que ese aspecto como diferenciación. Estamos trabajando para que sean más empáticos y puedan hacer gestos. Incluso estamos considerando un proyecto de lenguaje de signos con una universidad, para que el avatar pueda traducir lo que se habla en clase al lenguaje de signos.
¿Nos sustituirán algún día por avatares?
Creo que la IA no viene a sustituirnos, sino a complementarnos como un copiloto. Tiene sus limitaciones. Al principio, parece muy buena, pero trabajando con ella te das cuenta de sus limitaciones. El ser humano siempre es superior. Se habla mucho de la inteligencia artificial general, pero no sé si será tan cómo nos cuentan. Igual que una calculadora hace cálculos más rápido o un ordenador tiene más memoria, la creatividad es nuestra. Entrenamos a la máquina, y ella crea bajo esa información. No se va a salir de unos patrones probabilísticos más allá de lo que ya le hemos dado.
¿Qué consejo darías a los jóvenes que están pensando en su futuro profesional?
La idea es inspirar a las nuevas generaciones a mirar más allá, a estudiar lo que deben por normativa y a ser autodidactas para enfrentarse al mercado. Siempre hay que tener ese espíritu de querer más. La inteligencia artificial puede ser una herramienta poderosa si se utiliza correctamente y se complementa con el conocimiento humano.

Por Carlos Fernández-Alameda,
Delegado de ANPE Nacional